Esperanza de vida y baja natalidad afectarán sustentabilidad del IPS

Noticias

04 de abril de 2016

La esperanza de vida y la cada vez más baja tasa de natalidad en el Paraguay son algunas de las problemáticas que están complicando la sustentabilidad del sistema previsional que rige en el Instituto de Previsión Social (IPS), según informe actuarial presentado la semana pasada por sus autoridades de la entidad. El presidente del IPS, Benigno López, urgió iniciar lo antes posible un amplio debate sobre la necesidad de realizar una reforma profunda al IPS, de modo a evitar "situaciones más dolorosas" en el futuro, considerando que dentro de 20 años, o menos, y si todo sigue como hoy, el sistema previsional del IPS comenzará a registrar problemas financieros. En ese sentido, y en cuanto a la esperanza de vida después de cumplidos los 60 años, el informe actuarial señala que para el año 1965 se estimaba pagar jubilaciones a una persona de 60 años durante 16 años si era hombre, y 17,9 si era mujer. Sin embargo, en el quinquenio 2010-2014 ya se necesitaba adicionar 3,6 años más para los varones y 3,8 años más a las mujeres para el mismo fin. Paralelamente, la tasa global de fecundidad (TGF) en Paraguay registra una "clara tendencia" decreciente, pasando de 6,2 hijos por mujer, en el quinquenio 1965-1970, a 2,8 hijos por mujer en el quinquenio 2010-2014. El documento acota que el aumento de la "esperanza de vida" va acompañado de una disminución de la tasa de fecundidad, lo que ya da indicios de que la pirámide poblacional tenderá a ensancharse. Dice que esta tasa también es calculada al momento del nacimiento y la misma es considerada a la hora de realizar las proyecciones demográficas. A diferencia de la tasa global de masculinidad, la tasa específica presenta un comportamiento más errático debido a que se obtiene de la misma fuente, pero a un nivel más desagregado y por lo tanto menos representativo. En 2007 había 17% más nacimientos masculinos que femeninos; sin embargo, al 2011 esta tasa descendió, llegando a revertirse, con un nivel de 12% más nacimientos femeninos que masculinos. No obstante, para el 2014 la tasa nacimientos masculinos aventajó en 20% al femenino. (Abc Color – 4 de abril de 2016).